martes, 2 de agosto de 2011

LA INTERMINABLE CONQUISTA DE MÉXICO (CRÍTICA)

Por: A. Jibran M. Macossay.


El autor del libro una vez más nos trae mediante esta obra un divertido resumen de lo que vendría a resultar parte de la historia de nuestro país, desde épocas precolombinas hasta el sexenio de López Portillo, pero más que la historia resumida y divertida, el texto en general me ha parecido enfocado a una política que podríamos describir como neo-populista que tanto a caracterizado en los últimos lustros a países sudamericanos.

La información contenida en el libro-historieta tiende a ser escueta y superficial, y me atrevería a decir que no es un libro para personas con poco o nulo conocimiento sobre la historia de la conquista mexicana debido a que podría crearnos una falsa percepción de los que hechos ocurridos pese a que se enumeran diversas situaciones que resultan polémicas y algo reveladoras.

Se expone a menudo a los políticos estadounidenses –sobretodo-, como los causantes de las desgracias de las que “disfrutamos” en este país dando más crédito a la idea de que somos parte de un país tercermundista debido a que así lo han querido los extranjeros, más que buscar un culpable sería más beneficioso encontrar y luego aplicar una solución que realmente haya sido concebida para los requerimientos de la población mexicana y no utilizar la fórmula tan gastada de siempre que consiste en evitar una vez más nuestras responsabilidades y hacer culpables a otros de nuestra mala situación.

Se describe la pérdida de territorio como una mutilación donde la cual México perdió una riqueza incalculable la cual al parecer, el autor nos vende como una causa que fue necesariamente hacedora de México un país pobre, ahora yo me pregunto ¿no hubiera sido México el mismo país con esas tierras? Yo creo que sí, una vez más atribuimos nuestros males a la pérdida de recursos naturales y los vemos como un limitante del desarrollo, cuando países como Japón siendo un conjunto de islas realmente sin recursos, se convirtió en la segunda potencia económica del orbe, he ahí la fehaciente prueba de que la clave se encuentra en la determinación de los pobladores para lograr el bienestar social, económico, cultural y tecnológico hay que estar en constante búsqueda de ellos debido a que no llegan de manera espontánea, sino son el resultado del esfuerzo constante de generaciones comprometidas a lograr mejor calidad de vida.